Interesante texto escrito por uno de los descendendientes de la saga squashística de los Khan en el que enumeran los quince prefectos a seguir para convertirte en un super-jugador de squash.
I. Correr todo lo que puedas. Preferiblemente cuesta arriba o cuesta abajo para simular la posición en la pista. Mejoraremos nuestra fuerza y resistencia.
II. Bicicleta o remar. Dos veces a la semana para fortalecer nuestras piernas.
III. Nadar. Dos veces a la semana para mejorar nuestra capacidad pulmonar total y por tanto nuestra resistencia aeróbica.
IV. Ver squash de élite. Un mínimo de dos veces a la semana para aprender de los mejores. Nuestras ganas por mejorar aumentarán.
V. Apuntarse a un campus de squash. Ya sea en verano o en invierno una megadosis nos hará mejor jugador.
VI. Nutrirse adecuadamente.
VII. Leer sobre squash y psicología deportiva. Nuestro deporte es lo más en la relación mente/cuerpo.
VIII. Jugar en las ligas locales. Nos enfrentaremos a diferentes tipos de jugadores y nos pondremos listones cada vez más altos.
IX. Descansar. Tres semanas de entreno duro y una de reposo con práctica individual y estiramientos. Debemos escuchar a nuestro cuerpo y así evitaremos las temidas lesiones.
X. Jugar 3-4 veces a la semana en las semanas de duro entrenamiento.
XI. Practicar sólo 30 minutos tres veces a la semana. Es duro, a veces aburrido pero totalmente imprescindible.
XII. Practicar sombras cada semana para mejorar nuestro movimiento en la pista.
XIII. Encuentra un buen entrenador que te muestre el camino a seguir.
XIV. Equípate con buenas raquetas y buenas zapatillas.
XV. Trabaja tu concentración. Ya sea solo en la pista o realizando yoga/meditación.